Huesca, Albacete, Badajoz y Logroño suman más de 72 millones de inversión, pese a tener menos de 35 pasajeros al día

Cuatro de los cinco aeropuertos con menos pasajeros se inauguraron en la última década

Los aeropuertos de Huesca, Albacete, Badajoz y Logroño son un claro ejemplo de las muchas infraestructuras que se construyeron en España al calor del boom de la construcción y de la expansión económica sin tener mucho sentido.

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Agoncillo
Instalaciones del aeropuerto de Logroño-Agoncillo.
Los aeropuertos de Huesca, Albacete, Badajoz y Logroño son un claro ejemplo de las muchas infraestructuras que se construyeron en España al calor del boom de la construcción y de la expansión económica sin tener mucho sentido.

Todos ellos se inauguraron hace menos de diez años, con una inversión conjunta de 72,2 millones de euros, al margen de lo que cuesta mantenerlos desde entonces. Sin embargo, su tráfico no deja de caer y en los cinco primeros meses de 2013 suman poco más de 8.700 pasajeros, es decir, entre todos no llegan a los 60 viajeros diarios.

El aeropuerto de Huesca es uno de los mayores despropósitos de Aena en los últimos años. Se inauguró en 2006, tras una inversión de 40 millones de euros y hasta mayo registró 93 pasajeros, lo que supone que por allí pasan dos pasajeros cada tres días aproximadamente.

El de Albacete se estrenó un año antes, en 2005, sobre las instalaciones de la base aérea de la provincia, de ahí que su inversión fuera menor. La nueva terminal de vuelos comerciales supuso un coste de unos 7,5 millones de euros, aunque su éxito en cuanto a pasajeros sigue el mismo camino que el de Huesca. Este año, suma 570 pasajeros, el 40 por ciento menos que el año anterior, menos de cuatro diarios.

Badajoz: 3.703 pasajeros este año

Badajoz tiene el aeropuerto más moderno, ya que se inauguró en 2010, con una inversión de 6,7 millones de euros. Su coste no fue muy alto, ya que también se utilizaron las instalaciones de la base de Talavera la Real. Este año acumula 3.703 viajeros hasta mayo y eso que el gobierno regional ha presupuestado 1,8 millones de euros para animar los vuelos comerciales en el aeródromo.

El de Logroño se abrió en 2003 y este año también se ha quedado sin un 43 por ciento de sus viajeros, cerrando los cinco primeros meses del año con 4.351, a razón de 29 cada día. Su puesta en marcha costó 18 millones de euros y tiene una gran competencia a su alrededor, ya que en un radio de menos de 200 kilómetros tiene los aeropuertos de Vitoria, Bilbao, Burgos y Zaragoza.

El quinto aeropuerto de pasajeros con menos tráfico es Vitoria, más antiguo que los anteriores (se inauguró en 1980). Aunque su cifra de viajeros ha caído con fuerza desde el inicio de la crisis y este año no llega aún a los 2.000 pasajeros, lo cierto es que sigue siendo uno de los grandes centros de mercancías de España. Es el cuarto aeródromo con más tráfico pesado, tras Barajas, El Prat y Zaragoza, con un crecimiento del 11 por ciento este año.

Estos datos desmienten las palabras que el presidente de Acciona, José Manuel Entrecanales, que aseguró que sólo el uno por ciento de las infraestructuras construidas en los últimos años era innecesaria.

Fuente de la fotografía.